sábado, 9 de octubre de 2010

No me entero de nada

- Papi, ¿sabes qué? - me preguntó Gloria, con su camisón nuevo de la sirenita y esos ojos verdes que me mirabas muy abiertos.
- ¿Qué?- le dije mientras me agachaba para ponerme a su altura, de forma que me pudiese hablar de igual a igual, y no mirando hacia arriba.
- Pues que Mami me ha regalado uno de sus libros. El gordo.
- Pero, ¿un libro de niños?
- Nooo Papi. El gordo. El suyo. El que ya se ha leído.
- Y..., ¿tu sabes leer?
- Pues claro que no. ¿Y qué mas da? Me lo ha regalado para que lo lea cuando sea mayor.
En ese momento me miró con esa cara de "es que no te enteras de nada" y salió corriendo.
Todavía permanecí unos segundos en cuclillas, mirando el lugar donde Gloria había estado tan solo unos segundos antes.
- ¡Cuánta razón tenía esta niña de tan solo cuatro años! Es que no me entero de nada.

lunes, 11 de enero de 2010

Es tan violeta ser ignorante!

Yo no me sé expresar.
A lo mejor otras podrían explicarlo mejor, pero yo siempre he sido igual, es mucho más fácil hablar de las cosas tristes que de las alegres

viernes, 8 de enero de 2010

¿Quién soy ?

¿Soy yo mismo, o acaso soy lo que los demás quieren que yo sea?
¿O quizás soy lo que yo pienso que los demás quisieran que yo fuese?
¿O más bien pretendo ser lo que yo pienso que en general debería ser una persona ideal? Es decir, trato de tener o simular o emular o copiar las cualidades que una persona "ideal" debería tener.

Entonces, ¿en realidad qué vida estoy viviendo? ¿La mía? ¿La de los demás? ¿La ficción que yo he creado tratando de emular a otra persona?

Expiro profundamente,..... saco todo mi aire de mis pulmones y me quedo unos segundos tratando de echar fuera de mí todo ... Aguanto un poco más, tan solo unos segundos, me gustaría dormirme, unos minutos, unas horas, unos días, unos años, una vida.... y no despertar.
¿Realmente quiero eso?
¿Quién soy?

El planeta B512

La primera vez que fui consciente de la existencia del planeta B512 apenas tendría unos 14 años. Mi profesora de francés me recomendó la lectura de un libro que me ha acompañado toda mi vida. El dibujo de la boa cerrada, el del cordero dentro de la caja de cartón, los baobabs, ... son simplemente geniales. Pero lo que más me gustó de este minúsculo planeta fue ese dibujo donde se ve a nuestro gran amigo sentado en una silla contemplando la puesta de sol. Lo imagino moviendo la silla cada cinco minutos, para así estar contínuamente presenciando una puesta de sol.
Creo que fue tras esta lectura cuando comencé a fijarme con más detenimiento en las salidas y las puestas de sol. Qué bello sería vivir una vida presenciando infinitas puestas de sol.
Esto es lo que pienso, esto es lo que digo...
Pero me engaño a mí mismo, soy un hipócrita, pues tengo la ocasión de ver una cada día, y no me molesto en hacerlo. Siempre estoy "ocupado", la vida laboral, el estrés familiar, .................

Qué triste es la vida, o qué miserable mi existencia, si no soy capaz de hacer lo que más deseo.
O quizás es que no lo deseo, y tan solo lo digo para convencerme a mí mismo de algo que me gustaría creer...
No sé.

sábado, 26 de diciembre de 2009

Libre, pero entre rejas

Denunciar no sirvió de nada.
Lo hice. No tuve elección: su vida o la mía.
Mamá, cuida a mis niños hasta que salga de prisión.

Primeras líneas

Acabo de ver la luz. Estos son mis primeros lloros. Aunque pensaba que no sería capaz, no me ha hecho falta el azote del doctor...

No parece tan difícil. ¿O quizás sí?